top of page

Hidratación en tiempos de calor; uso de bebidas rehidratantes

Nutricionista Natalia Rossel

No es novedad, que las condiciones climáticas traigan consigo altas temperaturas a las que todos nos hemos visto expuestos y sofocados. Es aquí, donde debemos tener especial cuidado con nuestra hidratación, ya que en verano hay que reponer los líquidos extras que perdemos por el calor, la actividad física y la exposición al sol, para evitar deshidratarnos.


El agua además de hidratarnos, permite que se desarrollen procesos vitales en nuestro organismo, contribuye a eliminar toxinas, ayuda a utilizar y movilizar nutrientes, regula la temperatura corporal, entre otras funciones.



¿Con qué hidratarnos y en qué cantidad?


Las necesidades de nuestro organismo son de agua pura. No incluye, café, té, bebidas o jugos azucarados o endulzados, tampoco bebidas isotónicas o rehidratantes. Estos últimos, en vez de hidratarnos o realizar procesos vitales en nuestro organismo, podrían causarnos diversas enfermedades o consecuencias negativas para nuestra salud.


  • En menores de seis meses toda el agua debe provenir de la leche materna.

  • 6-12 meses: 800 -1,000 mL/día, sumando leche materna e introducción progresiva de agua.

  • 2-3 años: 1,300 mL/día

  • 4-8 años: 1,600 mL/día

  • 9-13 años: las mujeres deben consumir 1,900 mL/día y los hombres 2,100 mL/día.

  • Mayores de 14 años, aplican las mismas recomendaciones de consumo de agua que para los adultos.

  • En términos generales, un adulto debiera beber como mínimo entre 2 a 3 litros diarios de agua diarios.

  • Si hay exposición a altas temperaturas, práctica de ejercicios o sudoración, se debe ingerir un aporte extra de líquido al mencionado sin esperar a sentir sed.

  • El consumo de alcohol produce deshidratación, retención de líquidos e hinchazón, por lo que se debe evitar.

  • El agua aportada por los alimentos, como frutas, verduras y sopas, puede ser cercana a 1 litro al día.



Las bebidas isotónicas o rehidratantes contienen sales minerales, en especial sodio, potasio, cloro, hidratos de carbono y azúcares al 6% (en la mayoría de los casos, otras son sin adición de azúcares, pero endulzadas con edulcorantes) y colorantes artificiales.



Éstas sólo son recomendables en los siguientes casos:


Para deportistas:


  • Durante el ejercicio, para mantener el estado de hidratación y con ello el rendimiento y después del ejercicio, para conseguir una reposición adecuada de los fluidos y electrolitos perdidos durante la actividad física.

  • Idealmente en ejercicio de intensidad moderada a alta o después de una actividad de al menos 60-90 min.

  • No es necesario siempre que se haga deporte.



En niños menores de 5 años, no está permitido el consumo de bebidas isotónicas; en los mayores de 5 años podría recomendarse en cuadros gastrointestinales, que conlleven a una deshidratación (vómitos y diarreas), indicado previamente por un profesional. Sin embargo, no se sugiere en caso que tengan sed, calor o realicen ejercicio.

El mal consumo de bebidas isotónicas sólo está contribuyendo a las altas tasas de obesidad y al riesgo de presentar otras enfermedades crónicas no transmisibles, como es la resistencia a la insulina y posteriormente la diabetes.


Como se mencionó anteriormente, la primera opción para hidratarse debiese ser el agua, sin embargo, si no tenemos ese hábito se puede comenzar con las siguientes ideas:


  • Agua de fruta cocida sin endulzar.

  • Botella o jarro con trozos de fruta: rodajas de naranja, manzana, pera, ciruelas, pomelo.

  • Botella o jarro con trozos de verduras: trozos de pepino, apio, zanahoria, rodajas de limón.

  • Botella o jarro con hierbas: hojas de menta, trozos de jengibre, hojas de albahaca, ramas de canela.

  • Botella o jarro mix.



Comments


Artículos

bottom of page