Se trata de uno de los tipos de Cefaleas – los trastornos más comunes del sistema nervioso- caracterizadas por dolores de cabeza recurrentes.
¿Qué es la migraña?
La Migraña se define como una Cefalea primaria, esto es, que se presenta de forma independiente y no está causada por otras enfermedades
Migraña o jaqueca son dos términos idénticos que definen un tipo de dolor de cabeza que se caracteriza por crisis de dolor (generalmente en una o en las dos sienes) de duración entre 4 y 72 horas y, en general de carácter invalidante, es decir, que la persona se ve obligada a abandonar su actividad habitual o al menos a limitarla, mientras dura el dolor.
Suele acompañarse de náuseas, vómitos, hipersensibilidad o malestar (molestia o incomodidad) con la luz y los ruidos.

Tipos
Existen tres tipos de migraña los cuales pueden afectar a alguien.
1. Migraña con presencia de aura: se presentan signos de advertencia antes de que comience la migraña.
2. Migraña sin presencia de aura: ocurre de un solo lado de la cabeza, es palpitante y severo y empeora al moverse.
3. Migraña sin dolor de cabeza: ocurre cuando una persona presenta aura pero no experimenta dolor.
Factores de riesgo
Existen ciertos factores de riesgo que pueden ayudar a desarrollar migrañas, por ejemplo:
Historial familiar: si una persona de la familia padece migrañas, probablemente se puede desarrollar también en otro familiar.
Edad: la migraña comienza a cualquier edad. Es posible que la primera ocurra a menudo durante la adolescencia. Este dolor tiende a tener un pico durante los 30 años y disminuir en intensidad y frecuencia en las décadas posteriores.
Sexo: las mujeres tienen tres veces más posibilidades de padecer este dolor de cabeza.
Cambios hormonales: las mujeres pueden presenciar migrañas justo antes o poco después de la menstruación.
Síntomas
La migraña en ocasiones obedece a una serie de etapas. Conforme estas se desarrollan, aparecen síntomas que van cambiando o evolucionando.
Etapa pródromo: antojo de ciertos alimentos, depresión, fatiga o bajo nivel de energía, bostezar con frecuencia, hiperactividad, irritabilidad, rigidez en el cuello.
Etapa con aura: dificultad para hablar claramente, sensación de hormigueo (en cara, brazos y piernas), ver formas, luces parpadeantes o puntos brillantes, pérdida temporal de la visión.
Etapa de ataque: mayor sensibilidad a la luz y sonido, náuseas, mareos o sensación de desamayo, dolor en un lado de la cabeza (derecho, izquierdo, frente, nunca o sienes), dolor de cabeza pulsátil y palpitante, vómitos.
Después de esta etapa, a menudo se experimenta la etapa posdromo, generalmente en esta fase hay cambios en el estado de ánimo y sentimientos. Es posible que vayan desde sentir euforia, felicidad o fatiga y apatía. Puede persistir un dolor de cabeza suave y débil.

¿Cuál es la causa de la Migraña?
La causa de la migraña es desconocida.
Se sabe que los episodios pueden desencadenarse o agravarse por la concurrencia de uno o más estímulos -agentes físicos, situaciones sociales o condiciones personales- en personas con alta sensibilidad para los mismos. Éstos no son comunes ni son específicos para todas las personas que padecen Migraña; cada una la transita de modo particular.
Esos estímulos o factores desencadenantes pueden ser:
- Psicológicos: estrés, angustia, conflictos, entre otros.
- Hormonales: menstruación, anticonceptivos, terapia con estrógenos etc.
- Alimentarios: ayuno prolongado, queso curado, ciclamato, chocolate, cecinas, edulcorante, etc.
- Medio-ambientales: Olores intensos, humo, luz brillante, tabaco, cambios de temperatura etc.
- Patrón de sueño: excesivo o insuficiente, fatiga.
- Fármacos: preparados con cafeína, descongestivos nasales, etc.
- Bebidas: alcohólicas (vino, y licores, sobre todo), con cafeína.
¿Cómo se pueden prevenir los episodios de dolor?
Prevenir una migraña tiene por objeto identificar y evitar algo en particular que
desencadena un ataque.
Aprender qué alimentos o situaciones actúan como desencadenantes o agravantes para poder evitarlos.
Prevención evitando desencadenantes:
Huevo
Alcohol (particularmente vinos tintos)
Chocolate
Productos lácteos.
Edulcorantes artificiales.
Quesos añejos.
Cafeína.
Glutamato Sódico como potenciador de sabor.
Otros eventos o situaciones que podrían desencadenar migrañas incluyen:
Deshidratación
Clima caluroso
Hambre
Luces brillantes, incluyendo el Sol
Sonidos fuertes
Cambios en patrones climáticos
Esfuerzo físico intenso
Falta de sueño
Estrés
Fumar
Obesidad
Olores fuertes (perfume, diluyentes de pintura o humo de segunda mano)
Menstruación
Pastillas anticonceptivas o terapias de reemplazo hormonal.
¿Cuál es su tratamiento?
Es importante que sepas que la migraña no tiene cura, pero sí hay tratamientos para los episodios de dolor que la caracterizan:
Tratamientos sintomáticos: El sintomático (es decir, para cuando aparece el dolor de cabeza)
- Analgésicos simples o calmantes, con poco nivel de eficacia.
- Antiinflamatorios, útiles en los episodios de dolor no muy intenso. Pueden producir efectos secundarios molestos (sobre todo el área gastro-intestinal).
- Triptanes: Son el tratamiento de elección para los episodios de dolor con un grado muy alto de intensidad.
IMPORTANTE: Evite el uso de antimigrañosos comunes y de venta libre que contengan ergotamina debido a que su uso ya está obsoleto por el efecto rebote que genera su uso.
Tratamientos de prevención:
Los tratamientos preventivos pueden ser recomendados para casos más graves, cuando las migrañas se padecen con mucha frecuencia. Se trata de medicación diaria que se pauta por temporadas y debe ser prescrita y seguida por su médico tratante (Ej. Neurólogo).
Importante: Consultar siempre en función de la frecuencia, número y duración de los episodios, intensidad del dolor, invalidez que genera y síntomas así se indicara el tratamiento adecuado para cuidar tu salud.
El tratamiento preventivo cuando es necesario se hace, en general, con alguno de los fármacos de los siguientes grupos:
- Betabloqueantes
- Bloqueadores de los canales del calcio
- Fármacos que actúan sobre el sistema renina-angiotensina-aldosterona
Terapias alternativas
Algunos tratamientos no tradicionales o alternativos resultan útiles contra la migraña. Algunas de estas son:
- Acupuntura
- Masaje
- Técnicas de biorretroalimentación: Una técnica de relajación que ayuda a aprender a controlar respuestas físicas. Estas se relacionan con el estrés, tensión muscular y dolor. Al aprender estas técnicas, se pueden realizar en cualquier lugar, con resultados mixtos.
- Productos con base en hierbas permitidos
- Vitaminas como riboflavina, magnesio o la coenzima Q10.
Es muy importante que solamente tome los medicamentos recetados por su médico, tal y como le haya indicado, y evite la ingesta de cualquier otro tipo de fármaco para tratar las crisis de migraña. Del mismo modo, es recomendable que para cualquier duda sobre su enfermedad o los medicamentos consulte con su médico.
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